Crítica: 28 Días Después

Antes de comenzar he de decir "28 Días Después" es una de mis películas favoritas, la cual marcó un antes y un después en las películas de género zombie (aunque sean llamados infectados): Los "zombies" lentos y los "zombies" rápidos.

La cinta comienza con una imprudente acción por parte de unos activistas en un laboratorio, para luego despertarnosen el hospital junto a nuestro protagonista, Jim (Cillian Murphy), con él descubrirémos que le ha ocurrido al solitario, silencioso y abandonado Londres. Notas y fotos de desaparecidos que cuelgan de un mural de Piccadilly Circus, titulares de evacuación que muestran las portadas de los últimos periódicos, nos harán temer lo peor. Un comienzo que consigue que nos metamos en la piel del protagonista y sentirnos vulnerables.

La primera vez que seamos "sorprendidos" por los infectados nos daremos cuenta que indiscutiblemente no se trata de zombies, al menos de esos que estamos acostumbrados a ver en las películas de Romero, sino de algo más violentos, rápido e inteligente. Esta vez el polifacético director Danny Boyle ("Trainspotting","La playa", "Sunshine") nos muestra el terror en estado puro, utilizando a unos actores casi desconocidos sin echar mano de caras demasiado conocidas, más tarde aparecerán los militares capitaneados por nada más y nada menos que el actor Christopher Eccleston (el noveno Doctor Who) para así mostrarnos la crueldad humana, y los instintos animales que todavía quedan en el interior del ser humano. Una gran y satisfactoria película de terror con imágenes memorables, muy crudas y realmente sangrientas que ha significado un antes y un después en el género de cine zombie. Un trabajo magistral y de obligado visionado.